martes, 8 de diciembre de 2015

¿Por qué no hay que obligar a los peques a tomarse la foto con Santa Claus?






Este mes en todos y cada uno de los centros comerciales encontramos a Santa Claus y parte de la tradición para muchas familias es tomarse la foto con él.

Algunas veces vemos pequeños pegando de gritos y los padres haciendo hasta lo imposible para que se sienten en el regazo de Santa.

Probablemente en la mente de nosotros los adultos el pensamiento es: ¿Pero por qué no quiere? ¡Es solo un segundo! ¡La foto no será la misma si yo lo cargo!

¿Y qué pasará en la mente de nuestros peques?  Generalmente de los 6 meses al año de edad los bebés presentan angustia y miedo a la separación de sus padres y también a las caras desconocidas. A esto agreguemos una cara con una gran barba y un gran gorro que seguramente son nuevos para el bebé.

Del año de edad a aproximadamente los 4 años presentan miedo a los disfraces (payasos, mimos, Santa Claus). Es un miedo normal y válido en nuestros pequeños.

No es justo forzarlos a tomarse una foto con el personaje al que le temen.  Y  menos justo aún es invalidar  sus sentimientos.  Imagina que tú tienes un miedo terrible a las arañas, alguien te pone una araña en la cara y ante tu reacción te dicen cosas como: “No es para tanto” “No hace nada” “¡Qué exagerada!” “¡No llores!”.

Es importante que le expliques previamente a tu peque quien es Santa, familiarízalo con el personaje, pero nunca lo obligues a acercarse a él si no quiere.  La foto con Santa Claus se puede tomar con tu bebé en tus brazos o en tu regazo, brindándole la seguridad que necesita. Y aceptémoslo, la foto con Santa no es lo PRIMORDIAL en Navidad.

Soy fiel creyente que a los hijos hay que criarlos y tratarlos como uno quisiera ser tratado.

¡FELIZ NAVIDAD!

-Jenny-